Después de una dolorosa relación, Dan no estaba dispuesto a volver a dejarse llevar por sus sentimientos. Trabajando con Clare en un espacio tan reducido, Dan aprendió a confiar en ella como enfermera y, a medida que crecía la tensión entre ellos, se iba haciendo más evidente que, si no empezaba a confiar en ella también como mujer, su relación acabaría en auténtico desastre.